Una joven masajista con medias y ropa interior me seduce con un palo de bandera

Estaba en Japón, sintiéndome un poco estresada desde el largo vuelo, cuando decidí reservar una cita con un masajista local.La joven japonesa llegó a mi hotel y, después de una breve charla, comenzó a trabajar su magia en mis músculos cansados.Sin embargo, mientras me masajeaba la espalda, sus manos comenzaron a deambular por mi cuerpo, acariciando con burla mis puntos sensibles.Pronto me encontré sucumbiendo a sus seductores avances, mientras se quitaba lentamente la ropa, dejando ver mi ropa interior y medias.Sus maduritas, pero sexys, facciones eran cautivantes, y me vi completamente embobado por ella.Mientras se a horcajadas, su falda se subió, exponiendo sus calzoncillos rosados, ya no pude resistirme a ella.La penetré con un palo de bandera, y ella gimió de placer mientras la llenaba de mi esencia.