Mi vecina, una animadora caliente, anhela sexo duro. Soy su única amiga que puede satisfacerla, pero mi novia es estricta. Soy sorprendida en un emocionante juego de rol y lujuria prohibida.
Siempre he sido un gran fan de las animadoras, especialmente de aquellas que tienen el culo apretado.Mi vecina, una animadora joven y hermosa, siempre ha sido objeto de mis fantasías.Cuando yo estaba fuera, ella se acercaba y pasábamos la noche viendo películas y conversando.Pero eso no me bastó.Quería verla en acción, sentir su cuerpo contra el mío.Un día, mientras mi novia estaba fuera de la ciudad, decidí sorprenderla.La vendé los ojos y empecé a tocarla, sentir su piel contra la mía.Gemía mientras la tocaba, y podía sentir sus ganas creciendo.Me bajó la cremallera del pantalón y empequé a cogérmela, duro y áspero.Ella le encantaba, y pude escucharla gimiendo fuerte mientras la cogía.Era el mejor sexo que había tenido, y sabía que lo volvería a hacer.