Un hombre desconocido bien construido me descubre dándome placer en público y me ayuda a llegar al clímax

Estaba de paseo cuando tropecé con un auto que parecía estacionado en medio de la nada.Cuando me puse curiosa, me miré por las entintadas ventanas y lo que vi hizo que mi corazón acelerase.Un hombre desconocido bien construido, completamente desnudo, se estaba complaciendo.Sus manos grandes y firmes estaban acariciando su gran y firme polla, cada golpe lo acercaba más y más al borde.No pude evitar mirar mientras bajaba y comenzaba a tocar su coño, sus dedos explorando cada centímetro de él.La vista era demasiado para resistirse y me encontré uniéndome, mis propios dedos bailaban sobre mi propio coño.No pasó mucho tiempo antes de que se viniera, su caliente semen salpicaba por todo su cuerpo desnudos.La experiencia fue intensa, una perfecta mezcla de exposición pública y masturbación que me dejó sin aliento.